las voces

Estudiante ya no sabe qué pensar.
El viernes de madrugada entregó los últimos capítulos del sr. Eliot y estaba altamente feliz. Altamente. Le parecía que lo había hecho bien, que de todos modos habría cambios, pero que no serían violentos.
Hiperactiva de tanto café, té verde, azúcar y luz de PC se acostó pensando que el viernes sería un buen día.
Cuando se levantó, pasado el medio día, decidió que vendría a este blog a contar buenas nuevas. Y cuál fue su sorpresa! Desde el más allá el sr. Eliot le hablaba, más concretamente, le posteaba! No cabía de la emoción! Fue un rápido flash back a la emoción de la carta de Iván Valenzuela para ella en El Mercurio! Las autoridades le dirigían la palabra desde quién sabe dónde!
Llamó a MIK y le comunicó lo que sucedía. Intentaron dar con la persona tras Mr. Eliot, pero no hubo nadie. Estudiante estaba atónita.
Y hoy! Hoy Mr. Eliot le dedica poemas!
La vida de estudiante está tomando rumbos desconocidos. De pronto, es hora de tener una seria charla con Mr. Eliot. Por ahora, eso sí, por medios escritos. Estudiante no está preparada para un encuentro real.

largas noches

Ayer estudiante estaba decidida: lo iba a lograr. Se apagaron las luces de su hogar y ella seguía ahí, al pie del PC. Iba a conseguir acabar con la tesis del Sr. Eliot. Avanzaba, escribía, repensaba, reescribía y guardaba cambios. Todo iba de maravillas y estudiante pensó que dejaba el capitulo listo, cuando a eso de las 4:30am su suerte cambió.
No bastó su intención de pasar de largo para acabar, el poder de la madre fue superior y la mandaron a acostar. Hoy, nuevamente, está al pie del PC.
Ya es medio día y no ha logrado avanzar. De todos modos dice que ha de terminar, pues mañana es día de entrega. Esta vez, si las cosas –como en el fútbol- se dan, habrá acabado con los capítulos (que se multiplican cual gremlins al contacto con el agua… en este caso, de tés y cafés varios). Sólo restarán las conclusiones, y esas suelen ser simples. Suelen…

el día de la bestia

De: BFB.
Enviado el: Miércoles, 26 de Julio de 2006 10:34
Para: srta. de tesis en UAI
CC: P. Fernando que hace strudels
Asunto: Inscripción de Tesis

Srta. UAI
Presente

Junto con saludarla, por intermedio de la presente vengo en solicitar formalmente la inscripción de la Tesis para optar a la Licenciatura en Humanidades mención Literatura, de la alumna estudiante-paseante-trabajante-Wien, bajo el siguiente título tentativo:

“El proceso de edición del volumen I de The Criterion:
Una idea de revista literaria según T.S. Eliot”.

El proyecto constituye un aporte de singular originalidad para el estudio de las ideas críticas y estéticas de Eliot, aparte la historia misma de su labor editorial; de importancia paralela a su labor creativa. Naturalmente además, un trabajo de estas características desarrollado en Chile adquiere especial relevancia y connotación.

Finalmente estimo que este proyecto, desarrollado en el pregrado, será un aporte significativo al desarrollo académico de la Facultad.

Agradeciendo su atención a la presente, quedo atento a sus instrucciones

Atte
BFB

el comprahuevos

Trabajante hace días, semanas y casi meses que trabaja en un artículo. Cada lunes corre porque dicen que esta vez si que sí, esta vez sale. Mas nada. Nada de nada. Por mientras hace otras cosas por las que no sabe si ha de cobrar o no, y no le publican su hermoso cuento de la cripta.
Trabajante comienza a perder la paciencia con QP, y cuando lo hace, comienza a reportear otro tema. Al final, dice, no pude largarse, pues necesita el dinero para ir a Baires. Paseante ha instaurado la tiranía del viaje y trabajante ha de proveer.

el sistema

Trabajante está cerrando semestre (ya no sabe hace cuanto que cierra el mismo semestre!) y ha tenido luchas con el sistema. No contra la institucionalidad, sino contra el sistema. La tecnología insiste en hacer las cosas mal y trabajante ya no halla el modo de solucionar el caos.
Cómo puede ser que, finalmente, sólo aceptemos que no llegará a buen puerto? Que las personas se hayan dado por vencidas y respeten lo que dice ‘el sistema’? Bueno, así es.
Mis dulces y buenos alumnos serán sólo lo que el sistema digan que son.

vamos de paseo

Paseante necesitaba un respiro y, como la nieve no dejaba de caer en Portillo, decidió tomar un carro y largarse a la playa. Iba con Mari, MIK y Josecita.
Todas llevaban sus PC portátiles; estudiante llevaba libros para leer a TSE, y Mari decía que vacacionaba. Una fue más fuerte que todas. La chimenea tuvo más poder que los PCs que se arrumaban a la entrada de la casa.
Quisco city fue lugar de chales, chimeneas y tardes de cine italiano. Noches de sopaipillas recién hechas y cuentos sin destino alguno.
Al día siguiente el sol no aceptaba ser visto a través de las ventanas, así es que un paseo se impuso. La playa, el mar, su olor y las charlas una vez más, dejaron libros y PCs abandonados. Almuerzos en la terraza, cafés al sol y más de la misma buena vida inundaron un fin de semana de relajo.

Paseante fue feliz y hoy, hoy volvió a trabajar.

señor... señor... señor!, la mochila

Esto de los trámites, las pegas varias y la diversificación están jugando al límite con trabajante. Es que ya no sabe para quién trabaja!
Está en uno, pero debe hacer el otro. Va a pensar en algo y se le olvida, porque ya le han pedido otra cosa. Va a escribir a y nota que cuando abre el word ya no sabe a qué venía. Eso ha sucedido desde hace algunos días y trabajante, paseante, estudiante o quién sea, no ha podido venir por aquí. Sin embargo, vamos a por algunos temas.

1.- Alias: paseante últimamente charla mucho con sus amigos de Wien. Dice que se ríen y que hacen como que no hay océanos, continentes ni países entre medio. Dice que la última vez debatían sobre el futuro de Sydney Bristow (Jennifer Garner) en la serie favorita. Luego de tratar de dilucidar en qué temporada estaba cada una, de si morían o se reproducían, concordaron que sólo la veían por el guapo de Vaughn (Michael Vartan). Al parecer él ha muerto, por lo que su fans, irán en bajada. De pronto ha de volver a la vida (como lo han hecho todos los muertos de la serie).

2.- las invitaciones del estudiante: trabajante está cerrando ramos en las universidades. En una de ellas hay un joven que insiste en tomar café. Pregunta difícil para paseante… (trabajante?) Trabajante le ha dicho que sí, pues el joven dice que charlaran de literatura, novelas y publicaciones. Ya verá qué sucede.

3.- cine de pingüinos: no hay nada que ver en la cartelera! Niños del demonio, pueden regresar a sus escuelas? Hasta cuando! Todo aquello que se avisa sólo se exhibe en lugares y horas recónditas, todo porque los niños quieren ver a Superman en todas sus versiones. En todas! Lo dan en tantas salas, que de pronto lo exhiben en mapudungun…

cómo fue que acabamos aquí?

Discusiones más, luchas menos, el asunto es que paseante está en la capital cuando en las montañas se sucede el mejor día de la temporada de ski. No sabe bien cómo sucedió todo, pues ella había hecho hasta lo indecible para que diera resultado su plan, pero como siempre es una la que propone y Otro el que dispone, paseante tiene que conformarse con mirar la cordillera resplandeciente desde aquí.
Dice que la llevaron a almorzar al Pinpilinpausha, pero que no le achuntó al postre.
Dice que irá a ver una muvi, aunque la cartelera ofrece musho a Superman.
Dice que aquí aún se discute el futuro, pero que nada le parece satisfactorio.
Estudiante cree, que al parecer, es tiempo de volver a Eliot y leer el libro que llegó de London. Le tiene fe y parece interesante. Su teacher al menos, le envió un sms que decía: bkn! Puede ser que la felicidad de este fin de semana esté en esas páginas.
Irá a averiguarlo.

de la jaqueca al excel

Hoy trabajante no pudo más.
Las tantas horas de Starbucks le pasaron la cuenta.
Cuando sonó el despertador, trabajante se dio cuenta que no podía levantarse: era el ataque de la jaqueca asesina. Al parecer las horas frente al PC, los innumerables té, el calor de la calefacción y escuchar sin permiso la vida de otras gentes la había enfermado. Así fue como trabajante no fue a su pauta en QP, ni a su reunión por UAI o a hacer sus negocios por un nuevo celular.

Se quedó en su hogar sin Internet corrigiendo exámenes y pruebas que debía a los niños. Al caer la tarde, y con el trabajo acabado, trabajante solicitó ayuda de Bob el Constructor para hacer un Excel que comprendiera sus deseos. Trabajante no sabe cómo fue, pero hoy, su Excel hace mucho más de lo que ella puede entender. Incluso le habla, le recuerda cosas y le dice cuanta bondad necesitan sus niños para pasar el ramo. Cree que tratará ayudarlos… excepto al joven que necesita un 8.3. Cree que ese no tiene mucho por donde…
Trabajante se sorprendió de la tecnología, pero sigue pensando que le gustan más las tardes de chimenea y libros. Con café, por supuesto.

alguien quiere ir a mirar la lluvia?

Cuando afuera llueve, llueve y llueve con viento (cosa que a paseante le encanta!... ama el viento, cree que es lo más cercano a volar, y de volar a viajar… un solo paso!), trabajante está nuevamente frente a la pantalla del PC.
En la fría oficina que comparte con el contador -a quien no ha visto, pero se imagina-, no hay café. Dice que aunque odie su lugar de trabajo de los días pasados (no sabía que se podía estar tal cantidad de horas en un Starbucks), era bueno eso de tener el café –té en su defecto- a la mano.
Aquí, aunque dicen que alguien vendrá a arreglar el radiador, hace frío, no hay café y la Internet es como de tortugas. [Los conceptos dicen, alguien y el futuro vendrá, no suenan auspiciadores puestos en una misma frase… trabajante teme de los resultados.]
Pero como nada es perfecto, este es el sitio en que ha de estar trabajante.
Dice que tiene una reunión a las 10, pero que debe concluir una entrevista (cuántas veces hecha!) a la misma hora. Se plantea la simultaneidad de las personalidades. Trabajante cree que si dan resultado en este blog, es posible que haya éxito en la vida real. Sólo se cuestiona quién debe ir a dónde.
Si trabajante hace la entrevista, le versión poco profesional de paseante tendrá que asistir a la reunión. Los efectos podrían ser catastróficos, pero lo serían más aún, si lo hiciese del otro modo.
Trabajante aún tiene una hora para dilucidar qué hacer.
Cree que este día no va a resultar.
Aunque se vean las montañas maravillosas…

en Starbucks todos tienen PC

Qué sucede que cuando trabajante debe hacer la pega, aunque huya de los sitios que la distraen, de todos modos termina haciendo lo que no es importante, ni urgente ni nada de nada?
Es sólo que ante el PC, una excelente conexión a la Internet y un café, a paseante sólo se le ocurre aparecer. Y ya que está aquí, opina que hay que escribirles a los que están en el exterior. Contarles cómo va la vida, solicitarles regalos (siempre lo hace y últimamente le llegan!) y proponerles que la visiten. En un acto de extrema realidad, acepta que ella no irá a sus sitios/locaciones, pero les habla maravillas de su pueblo. Les dice incluso, que ha caído la nieve y que la cordillera se ve tan maravillosa como la recordaba cuando andaba por Wien.
Dice que las siglas laborales la tienen agotada, pero que debe regresar a ellas. Tal como hará ahora, una vez que apriete send.

la negativa laboral

Lo que sucede es que trabajante tiene mucho, mucho, muchísimo que hacer, pero no puede dar con el momento en que se sienta frente al PC y lo hace.
Dice que le aguardan pruebas y exámenes de la UAI y la UDLA. Cotizaciones y reestructuraciones en el SU; y como no, dos artículos para QP.
Suceden cosas, sucede el sueño, sucede la visita de ricurita, de las gentes, sucede el orden (que nunca acaba y los papeles de Wien siguen por ahí) y suceden numerosos elementos distractivos que no han dejado que trabajante se ponga manos a la obra. Y como de justificarse se trata, cada vez que decide comenzar a trabajar, recuerda las palabras de su editor el viernes a eso de las 20 horas: ‘ya, entonces me mandas el texto para verlo el lunes temprano, hablamos, llamas al sr. nuevamente para entrevistarlo y cerramos. Te parece? Sí? Bueno, entonces descansa el fin de semana.’ Trabajante sabe que hay una incoherencia en el discurso del sr., pero le gusta quedarse con la frase final, aquella de ‘descansar’.
Trabajante cree que ahora que ya no hay mundial, debe ponerse manos a la obra.
Los discursos no serán validos mañana.
Trabajante comienza ahora ya.

y llegó!

Es una caja hermosa: amarilla y auf deutsh.
Contenía Mozartkugeln, una caja de té verde, varios paquetes de Manner y cómo no, el magneto azul que me iba a robar.
El punto es que desde Wien, Kelly me ha enviado un presente. Los detalles típicos de nuestros días por allá, para que la frágil memoria de paseante no se pierda.
Y paseante lo disfruta. Disfruta el correo (aunque signifique días de trámites y empleados públicos), los regalos y los recuerdos. Le gusta todo y es feliz.
Aquellos que quieran venir a probar un poco de mi Wien, apúntense.
Les convidaré una probadita.
Sólo eso.

La visita aus Wien… oder aus Baires

El fin de semana fue de aeropuerto, pues el martes paseante había recibido un llamado en inglés: Christián venía a visitarla a Chile. Decía que no sabía nada (sigue sin saber ni entender nada de nada), pero que el fin de semana venía. Hablamos miércoles y nada. Hablamos jueves, menos. Hasta que a eso de las 6pm le dice: “hi I just made a booking. I will come TODAY at 23pm arrival time.” Así fue como comenzó todo.

Día 1
Paseante emprendió rumbo con su amiga Jose a esperar al joven. Esperaron, esperaron y esperaron. Ya no llegaba a las 11, sino a las 12. Ya no llegaba a Stgo., sino que había sido desviado a CCP*. A CCP! A eso de las 2am recibió el llamado: “hi, I’m in Conce… something. I’ll be there tomorrow at 11am”.

Día 2
Ok, paseante debía ir por él. Y fue. Sola esta vez.
Lo recogió, le besó dos veces como hacían en Wien y emprendieron rumbo. Fueron a por la feria y Jose. Arreglaron temas y decidieron ir a almorzar al Mercado Central. Fue lindo! Se sirvieron rico rico, sólo que al caballero no le gustaron los erizos. Paseante los disfrutó sin remordimientos. Acabado el almuerzo, se fueron a pasear por el city center. Paseante hizo gala de sus estudios históricos, literarios, políticos y mitómanos. Habló de edificios y sociedades. Cree que lo hizo bien. A eso de las 18 los abandonó, pues mal que mal, era viernes y debía trabajar para QP. La esperaba un entrevistado en la catedral. Acabando aquello, emprendieron rumbo a su hogar. El sr., como no, dormiría en su casa. Y si que durmió! Arruinando todos los panoramas de comidas, fiestas varias, despedidas y eventos, el joven calló en los brazos de Morfeo sin remedio. Paseante se resignó y también durmió.

Día 3
A eso de las 9am sintió que el caballero deambulaba, pero paseante se negó a considerarlo: necesitaba dormir. Ya a las 10:30 no pudo más y empezó el día. Haciendo gestiones de lobby e invitaciones decorosas, armaron un grupo y partieron a parrillar a La Parva. Qué sitio más lindo! Paseante no puede dejar de amarlo… Se divirtieron, comieron rico y vieron el partido. La francesa que no sabía cómo se jugaba al fútbol acabó hablando en plural a la hora de referirse a su equipo y alentándolo con gritos. Fue cómico.
Back en la ciudad, la srta. Mari pasó por ellos para ir al concierto de Vicentico. Paseante sufrió entonces un serio caso de desperfilamiento: bailó, cantó, gritó y disfrutó como hacía tiempo no lo hacía. Su clásico recato y autismo a la hora de los conciertos desapareció. Y como ya habíamos llegado a eso, ya nada importaba. Partieron entonces a la fiesta/cumpleaños de una srta. que paseante desconocía. Allí charlaron y bebieron hasta alguna hora innombrable de la madrugada, pero como el sr. aus Wien había asumido que debía ser ‘el alma de la fiesta’ insistió en que fuésemos a por baile. Y así se hizo. No teníamos intención de pagar o de buscar, así es que caímos todo lo bajo que se puede: le llevamos a Sucia. Hemos de reconocer que nos reímos y que la música estuvo genial, pero no lo suficiente como para regresar. Dieron por terminada la noche cuando el cierre de local les hizo emigrar. Paseante a esa altura sólo quería dormir.

Día 4
Proveniente de Wien había anunciado que no se despertaría antes de las 11. A paseante eso le pareció regio. De todos modos, él apareció antes de lo esperado en su pieza trayendo un libro. Eran frases, traducciones al ‘español’ de situaciones. Dígase cómo jotear a una chica, cómo acabar una relación y cómo piropear. Nada, por supuesto, era tal. Fatales todas! Más aún con el acento alemán/gringo/thai del joven. Paseante tuvo que instruirlo para que aceptara no usarlas nunca. Sin embargo, paseante se volvió a reír con lo malas que son las frases jotes en alemán. Todas, sin excepción, son para darle la espalda hasta al más galán. Sinceramente, ese no es el idioma del amor en el siglo XX. Quizás con Mozart de fondo puede ser…
Levantados y desayunados, procedieron a hacer una visita flash al pueblito de Los Dominicos. Ahí el sr. compró papayas y camotes secos que dejó abandonados en mi carro. (Alguien los quiere?) Y para ir cerrando, fueron a almorzar con toda la familia de paseante al Le Fournil. Comieron y corrieron. Ya era hora de volver al aeropuerto. Como no, paseante debía llevarlo. Pensó que tomarían un café al menos, pero no. En castigo a la privación de cafeína a pasante, el joven aus Wien vio retrasado su vuelo. Solo y aburrido, debió esperar en el aeropuerto.
De camino a la capital, paseante se rió mucho. Recordó los momentos diversos y concordó consigo misma que el visitante estaba perdido sin remedio. Eso, por supuesto, le divertía. Le hacía incluso, un gran sujeto. Dicen ahora que le visitarán en Baires. Paseante nuevamente sonríe e imagina la cita al otro lado de la cordillera.


*Concepción

eso del empleado público

Paseante recibió dos cajas desde Wien. Una con sus libros, papeles (qué gran cantidad, por Dios!) y diccionarios de alemán. La otra, que aún no logra retirar de aduanas, con chocolates y regalos varios enviados por Mike antes de dejar Viena.
En la obtención de ambos, paseante ha descubierto que si tenía poca paciencia para el trámite y el papeleo burocrático, tiene mucha menos para la estupidez del servicio público. Simplemente, no tiene. Es que cómo tanta!
Procederá entonces, sólo a relatar un momento:
La caja con regalos rotula su contenido como “chocolates”. Maldición! Ingenuidad de gringo buena gente! Ineptitud y falta de creatividad!. Su sólo nombre lleva a que a casa llegue un papel, con poca explicación y desordenado, que informa que para obtenerla hay que sacar un VBº del Seremi de salud. Paseante se halla en el aeropuerto por otras razones e intenta saltarse el protocolo. Dice que ‘de pronto no son chocolates y no necesito ir al Paseo Bulnes a retirar el VBº…’
La srta. abre, mira e inspecciona el contenido. Efectivamente son chocolates. No pueden entregarla antes que alguien de alimentos lo autorice.
Ahora deberá pedir un VBº que le será entregado por una funcionaria a kilómetros de distancia en una oficina con miles de persona que esperan su turno. Ella, sin ver la caja o leer el papel, le permitirá retirarla cuando vuelva otra vez al aeropuerto. Ella además, por poner la fecha y su nombre, le cobrará $6.114. Eso sin contar el estacionamiento, el tiempo perdido, las idas y vueltas, los paseos y el mal rato. Todo por justificar la ineficiencia.

Ahora les pregunta paseante, ¿por qué una srta. en el paseo Bulnes autoriza mi caja sin verla? ¿Por qué no lo hace la srta. que la vio? ¿Y si fuese droga caratulada de “chocolates”? Ella nunca lo sabría… Paseante está considerando dedicarse a ser dealer y engañar al servidor público.